Resumen de Noticias

Fue una historia real y ocurrió en 2005
Las paradojas del amor en Internet
No todas las cosas son lo que parecen en el mundo virtual

El muerto se paró ante el espejo y empezó a tratar de componer su pálido semblante en un esfuerzo vano por negar que ha muerto

Bogotá D.C., noviembre 20 de 2016. Sala de Redacción de ACCIÓN 13 Noticias. Hubo una época en Internet, donde cualquier chat fue un campo propicio para tratar de ligar, y en la práctica, sobre todo antes de 2007 y de que se consolidaran como emporios las páginas de citas, un gran porcentaje de hombres y mujeres usaron diversos sitios para conocerse, flirtear y en muchos casos, ir más allá, al plano real.



Esta historia está dándole la vuelta a la vasta Internet, y se trata de un caso real ocurrido en 2005 en Clarence, una pequeña ciudad en la parte noreste del Condado de Erie, Nueva York, donde Thomas Montgomery, de 45 años llevaba desde hacía 12 años una vida rutinaria, motona y asfixiante, o como lo diría la escritora colombiana Ángela Becerra en su novela “Amores Negados”:

“Sus días se habían convertido en un ir y venir de sueños frustrados; una monotonía vestía como uniforme su alma y le impedía disfrutar de nada”.

Thomas, estaba casado desde hacía 16 años, tenía dos hijos, trabajaba en una fábrica de perforación, tenía poco pelo, era obeso y la juventud le había dado un esquinazo hacia un tiempo divagando irregular pero firme hacia la cuesta suicida de la vejez y el olvido.

Un día, en medio de ese “negare che egli è morto”, ese negar que ya se ha muerto, se hizo aficionado a las partidas cada viernes al Texas Hold ‘Em en la Web de juegos gratis on line Pogo.com. La página tenía habilitado un chat que permitía interactuar con los otros jugadores.

Por esa misma época el buen Thomas, también como parte de ese “negare che egli è morto”, se quedó viendo su imagen en el espejo y lo que le devolvió la luna esmerilada desde la pared no le gusto.

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Thomas, había sido marine en su juventud y él quiso regresar a ese tiempo volviendo a ser un marine de 18 años llamado Tommy, diminutivo de Thomas. Pero no contento con esto se “convirtió” en un cinturón negro de kárate, un tipo atlético con una cicatriz de bala en el hombro izquierdo que le daría al personaje un aura de héroe.



Fue de esa guisa, que en forma digital Thomas, el amable Thomas, se convirtió en el apuesto Tommy, un marine que prestaba servicio en Irak, y creó así un perfil en Pogo.com, bajo el Nickname de MarineSniper. Al poco rato, Tommy, nuestro juvenil Tommy, conoció a una usuaria que tenía por Nickname Talhotblond, pero que en realidad era una linda jovencita de 17 años natural de Virginia cuyo verdadero nombre era Jessica, como se lo diría luego a Tommy.

A medida que chateaban y se conocían más, Jessica pasó a ser “Jessi”, y Thomas, (No hay que olvidar que Thomas era quien estaba detrás de Tommy), fue creando un historia intrincada pero colorida en torno a su perfil virtual. Le dio detalles de una vida llena de trabajos, sufrimientos, aventuras y desventuras donde un intrépido Tommy, salía airoso por pelos, todo para emocionar y conmover a la chiquilla.

Jessi, quedó atrapada por Tommy, su fuerte personalidad, su historia de vida, sus hazañas, todo el aroma viril que este chico de 18 años emanaba a través del chat.

La intimidad y complicidad entre ambos adolescentes fue creciendo, era una forma de escapar de la dura realidad que se vivía en Irak y que lo agobiaba, así Jessi era su faro, su polo a tierra, su norte, su ancla, al punto que el chico le confesó un buen día, que pensaba suicidarse allá en Irak, a lo que Jessi le respondió que le debía prometer que volvería sano y salvo por ella.

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Si, había encendido entre ellos la llama del amor, el un chico atlético, apuesto, valiente, heroico, pero sensible, vulnerable tan lejos de casa, en tierras barbáricas, rodeado de amenazas e infortunios, y ella, un rubiecita de 17 años, candorosa, hermosa, deseable, y fue así que ella le envió sugestivas fotos, lo suficientemente azúcar y pimienta como para inflamar el pecho de Tommy.

Al principio, Thomas, (por favor, no hay que olvidar que tras Tommy estaba Thomas, con sus 45 años, obseso, medio calvo, casado y con dos hijos), pensó que jamás conocería a Jessi, por lo que todo sería un juego, pero a medida que la relación avanzaba y los sentimientos entre ambos crecían, Thomas vio la necesidad de construirle a Tommy, su alter ego, su identidad secreta de super héroe virtual, más y más detalles. Nació así Tom Jr., el padre de Tommy, con quien chateaba Jessi cuando Tommy estaba en entrenamientos.

Y al llegar la necesidad de enviarle fotos suyas a Jessi, Thomas optó por mandarle unas suyas cuando era joven y estaba en el ejército. Y así, cada día más, el mundo creado por Thomas se fue haciendo más y más complejo, lleno de detalles y fantasías. Queremos mantener el ritmo de la narración, por eso no adelantaremos nada, por lo que simplemente diremos que Thomas diría, cuando fue interrogado por todo lo que ocurrió después que su vida como Tommy “se hizo más real para mí que la vida real”, incluso “Había sexo virtual entre ella y Tommy”, comentaron en el tribunal.

Se habían enamorado…

Y ese fue el comienzo del fin para Thomas Montgomery y para el apuesto e intrépido marine Tommy…pero mantengamos el ritmo y refrenemos la lengua…no es momento amiga o amigo lector para adelantar detalles.

Por ahora había trascurrido ocho meses desde que Tommy conociera a Jessi, y ambos estaban perdidamente enamorados. Incluso Thomas llegó a decir a sus compañeros de trabajo que dejaría a Cindy, su esposa y viajaría a Virginia para encontrarse con su verdadero amor: Jessi, a quien le propuso matrimonio, siendo aceptado por la fémina. A quien los Dioses quieren perder los privan de la razón, decían los antiguos griegos y romanos.



Albert Camus, dijo: “Al principio de las catástrofes, y cuando han terminado, se hace siempre algo de retórica. En el primer caso, aún no se ha perdido la costumbre; en el segundo, se ha recuperado. Es en el mismo momento de la desgracia cuando uno se acostumbra a la verdad”.

Un día, no cualquier día…ese día, no uno antes, ni uno después, sino ese día, como suele ocurrir generalmente cuando de desgracias hablamos, una de las hijas de Thomas, empezó a usar el computador de su padre y entonces apareció…Jessi se conectó al chat y empezó a saludar a Tommy.

La hija de Thomas, llamó a su madre y le enseñó el ominoso mensaje. Cindy, la esposa de Thomas, revisó los chat y se enteró de todo lo que ellos hablaban, luego revisó sus pertenencias y encontró cartas de amor entre Tommy y Jessi, e incluso unas bragas rojas que la chica le había enviado por correo a Tommy.

Cindy, finalmente le envió a Jessi una foto suya, con ella y sus dos hijas y le dijo:

“Permítame presentarle a estas personas. El hombre del centro es Tom, MI MARIDO desde 1989. Por cierto, Tom tiene 46 años. De lo que estoy sacando en claro de tus cartas es que estás más cerca de la edad de mi hija que de la mía. ¿Tienes más de 18 años?”.

La bomba había sido arrojada y tendría las mismas repercusiones que una bomba nuclear.

Cindy le dejo una nota a Thomas, cerca al ordenador para que este la descubriera al tratar de encender el equipo:

“No puedo creer que estés viviendo esta extraña fantasía, pero aún peor, como padre e hijo. Si quieres separarte podemos hacerlo… pero seguir mintiéndome a mí y a tus hijas mientras ella envía “regalos” para tu supuesto hijo es totalmente inaceptable”.



Thomas se mudó a vivir al sótano de la casa, aunque siguió viviendo con su esposa e hijas, mientras que Jessi, se preguntaba si todo lo que había dicho Cindy de Tommy era una mentira para terminar su amor adolescente.

Fue así que Jessi, angustiada y devastada por la pérdida de su amor, recordó que había un amigo de Tommy en Pogo bajo el nick Beefcake1572, siendo su verdadero nombre Brian Barret, un joven de 22 años quien trabajaba con Thomas e incluso jugaba poker con él.

Brian, no solo le confirmó toda la historia a Jessi, sino que se convirtió en su paño de lágrimas. Ambos jóvenes comenzaron a chatear con mucha más frecuencia. Sus pláticas se hicieron más y más íntimas.

Brian, le fue dando más y más detalles a Jessi sobre Thomas, recalcando que tenía 45 años y que la forma como él actúo con ella era la de un depredador sexual, un pedófilo, después de todo ella tenía 17, era menor de edad.

En poco tiempo Brian convirtió ante los ojos de Jessi, a Thomas, (Por si acaso no lo era ya), en un hombre viejo, pervertido, loco, mentiroso, un gordo calvo acechando a una hermosa adolecente…un fracasado.

Y al mismo tiempo Thomas estaba relegado al sótano de su casa, separado de su esposa, distanciado de sus hijas, ridiculizado por sus amigos y defenestrado ante su amor adolescente.

Cuando Thomas, en el fondo de su miseria, se enteró que Brian y Jessi tenían contacto por chat y que hablaban sobre él, enloqueció y se volvió verbalmente muy violento.

Entonces un día, (Ya saben, ee día y no otro día, ni antes ni después, sino ese día), Jessi, le escuribió en el chat:

“Me gustaba estar con Tommy, ¿lo echas de menos?”

A lo cual Tommy respondió: “Más de lo que jamás podrás imaginarte. Mi corazón me duele de escuchar que me llamas “tu Tommy”. Ojalá pudiera ser ese joven marine de 18 años para ti”.

Y Jessi, le dijo: “Lo sé Tom”.

Y fue así, ese día, (Ya saben el resto), que Thomas, ya de 47 años, se reencontró con Jessi, ahora ya casi de 19 años.

Thomas negaría haber sostenido charlas sexuales con Jessi, pero una revisión a los chats evidenciaría un fuerte contenido erótico. Ambos habían tenido sexo virtual.

Sin embargo, simultáneamente, Jessi tenía una relación con Barret, pero parecía que eso la conflictuaba por cuanto cuando Brian, quien era totalmente libre y autónomo, le ofreció viajar a Virginia a conocerla, la jovencita le ripostó que ella viajaría en esa época y no estaría en la ciudad.

A Thomas le decía que deseaba terminar con Brian, y él confió en que así ocurriría. Pero en 2006 se enteró que ambos continuaban su relación virtual.



Fue así que el 13 de septiembre del 2006, Thomas, fuera de control, le escribe a Jessi, la vilipendia y fustiga. La joven termina la relación y le dice que la deje en paz y no vuelva a contactarla.

Al día siguiente Thomas llama a Jessi, discuten, ella le cuelga, no se comunican otra vez.

Thomas, enfurecido, se dirigió a la fábrica al terminar la jornada laboral. Buscó a Brian, encontrándole cuando ya se había subido a su coche.

Como si se tratase de una canción ranchera o de un corrido ilegal, Thomas Montgomery salió al paso de Brian Barret, y le propinó tres balazos a través de la ventanilla matándolo en el acto, y convirtiendo así esta historia en una Crónica Roja, como en este punto han entendido.



Tras el crimen de Barret, la policía empezó a buscarlo sin encontrarlo. Las pesquisas condujeron a los sabuesos a la historia del romance virtual de Thomas, convertido en Tommy, con Jessi y pronto comprendieron que se había producido un triángulo amoroso entre Thomas, Jessi y el ahora difunto Brian.

Revisando las últimas llamadas y chats de Thomas encontraron los insultos y amenazas que Thomas le habia hecho a Jessi y llegaron a la conclusión que la adolescente rubia estaba en peligro y que el alocado Thomas podía viajar hasta Virginia y agredirla.

Uno de los detectives de la división de homicidios se comunicó con la madre de Jessi, quien le dijo que la chica aún no llegaba a la casa pero que le informaría de todo lo que estaba ocurriendo.

El policía no se conformó con eso y coordinó con sus colegas de Virginia, siendo así que un coche patrullero llegó a la casa de Jessi y golpeó a la puerta. Pero allí no estaba Jessi, la blonda y curvilínea adolecente, la Lolita que habia perturbado a Thomas y a Brian al punto de empujarlos a la tragedia. No, en la casa estaba Mary Shieler, una mujer de 45 años, muy poco agraciada y obesa, quien le confesó a la policía que había inventado a Jessi.

Mary era Jessi y Talhotblond, y por ella Thomas era un asesino buscado y Brian se enfriaba en una plancha de la morgue.

Mary Shieler, había tomado unas fotos de hija y las había usado para seducir a los dos hombres en la Red.

La historia terminó con Thomas Montgomery, divorciado, arrestado y condenado a 20 años de cárcel por el homicidio de Brian.

Brian, por su parte, obviamente murió.

En cuanto a Mary Shieler, aunque las autoridades trataron de llevarla ante un tribunal, no pudieron lograrlo, sin embargo su esposo le pidió el divorcio y su hija no le volvió a hablar.

Esta historia, que como dijimos al principio, se está viralizando contada de varias formas, pero en esencia igual, bien podría llamarse “El amor en los tiempos de Internet o crónicas del mundo de la no existencia”.

Con información de: https://es.gizmodo.com/, https://www.nytimes.com/, https://abcnews.go.com/, https://cronicadelinstante.blogspot.com.co/.

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